martes, 9 de febrero de 2016

Los Eñepas o Panares




El sistema social de los indigenas  Eñepas es muy informal: los jefes tienen muy poca autoridad y la opinión pública, es una fuerza notable para garantizar el orden y la obediencia a la ley o tradición. Por lo tanto el capitán tiene poder relativo y es seguido en importancia por el cacique.

Matrimonio: Tienen el sistema matrilineal, el esposo, al casarse, pasa a formar parte del grupo al que pertenece la esposa.

Creencias, ritos y religión
: Sobre la vida religioso-espiritual no se sabe mucho. Existen chamanes que curan y que protegen su grupo contra las “flechas” del chamán vecino. También creen en un jaguar sobrenatural y en una variedad de espíritus que merodean, en la noche, por la selva. Le tienen miedo a la noche, especialmente las mujeres. Los Panare salen muy rara vez de noche, y sólo cuando la necesidad les apremia y es absolutamente   necesario.

Muerte: Según la tradición de los Eñepas, al fallecer, la persona es enterrada con las pertenencias que utilizaba estando en vida, con la salvedad de objetos de fabricación industrial, obtenidos fuera de la comunidad.

Los Jirajaras

Los Jirajaras

Se vestían con un taparrabos denominado guayuco confeccionado a partir de fibras vegetales de la cocuiza.


Ritos: En los entierros y mortuorios tienen los mismos ritos que los Achaguas, si bien es verdad que son muy especiales las demostraciones de sentimientos que hacen con sus difuntos las mujeres que quedan viudas y los hijos.

Ritos Matrimoniales: Algunos días antes de la boda salen a montear las dos parentales de la novia y el novio, unos se preocupan por pescar y en cazar otros. El padre del novio lleva a su hijo a casa de la novia el mismo día del casamiento; La madre de la que se va a casar saca a su hija a la sala o portal del caney, entonces el suegro echa a la nuera una sarta de quiripa al cuello y la suegra al yerno otra y los sientan juntos, pone la madre junto a su hija un tinajón grande lleno de chicha para que vayan repartiendo entre los invitados de los dos parentales, beben y comen de la casería y pesca.  

No adoran ídolos pero se dice que hay dos dioses hermanos, uno mayor que otro en edad, del dios mayor dicen, que lo crio todo de nada y que destruyo en un diluvio a todos los hombres en castigo de sus pecado, pero que después el dios menor bajo de los cielos a la tierra a propagar el linaje humano que pereció en el diluvio y que vivió en el mundo siendo emperador de todos.

Los Ayamanes

La relación del ayamán con la naturaleza era muy estrecha. De ella no solo obtenían sustento, sino también aquellos materiales que necesitaban en su vida diária. Maderas para construcciones, sisal para hacer chinchorros, de varias maderas se construían el cañón para el techo, las trojas y barbacoas para guardar el maíz y otros frutos, de madera también elaboraban taburetes, bateas, cucharas, herramientas para, la cacería y la guerra: arcos flechas y macanas. De algunas plantas utilizaban sus raíces, cortezas, semillas, frutos y hojas para las medicinas.

Dentro de su cultura y folclore cabe destacar el baile de las Turas. Esta costumbre existe principalmente en un baile muy ceremonioso, tradición aborigen de los Ayamanes y los Jirajaras que se ha conservado en el tiempo para agradecer la prodigalidad de la madre naturaleza.


La recolección de palmas, miel y cera; y la presencia de cazadores, los cachos o cráneos de venado y el tributo de piezas de cacería, sugieren supervivencias muy lejanas de un pueblo recolector y cazador. Esta plenamente comprobado que ellos resolvían sus necesidades de productos de la tierra con los conucos que poseían y trabajaban regularmente, donde también aprovechaban la abundante cacería de venados, dantas, conejos y aves existentes.

viernes, 5 de febrero de 2016

Los Pemones

Los Pemón ha sufrido diversas intervenciones en sus creencias, básicamente el Pemón no cree en un ser supremo único y creador de todas las cosas, más bien su vida está marcada por la existencia casi mística de ciertos seres que manejan diversos estados de la conciencia y los sitios, como especie de demonios o Dioses con poderes específicos sobre una situación o lugar en determinado. Podemos decir que los pemón son un grupo muy dados a religiosidad en su vida diaria, que se enmarca en la creencia, en lo sagrado, en la actitud y los mitos, pero no hay ídolos, cultos ni oraciones.

La música y el canto están acompañados por danzas como el Parichara y el Tukui, donde participan hombres y mujeres. En uno de los estudios revisados se afirma que: “El contacto con la naturaleza les ha permitido agudizar su sentido del oído, además del gusto por la música, su repertorio es variado, entre ellas se encuentran las canciones de cuna, serenatas amorosas, canciones mágicas, entre otros.

Esto nos lleva a comprender el por qué de la utilización de variados instrumentos musicales como pitos y flautas de caña, tambores y maracas; todos elaborados con madera de los árboles, pieles de animales, y otros recursos naturales.





Los Gayones

En sus costumbres hacían bebidas en base a tubérculos y cereales Apio, Maíz, usan de más de 100 plantas medicinales, entre los rituales están el baile del jojoto baile de la Tura, las lloras y el gasto del muerto. En cuanto al idioma, al igual que sus hermanos Ayamán, se encuentra en vías de revitalización, para ello todas las comunidades disponen de una extensa compilación del léxico. 

Estatua Indio Gayon Bobare Estado Lara

Los Arahuacos

Los indios vivían de la pesca y la recolección de moluscos, y los indios de los llanos y la selva practicaron el cultivo de maíz y yuca. Además desarrollaron la técnica del tejido mediante la cual fabricaron hamacas, redes y cestas y con el barro elaboraron vasijas.

Los hombres y mujeres pintaban sus cuerpos y llevaban joyería hecha de oro, piedra, hueso y cáscara. Los juegos y la artesanía ocupaban también buena parte del tiempo. Uno de estos juegos se parecía mucho al fútbol y era llamado batú

A nivel religioso adoraban a los espíritus del bien y del mal, que podrían habitar tanto cuerpos humanos como objetos naturales. Ellos procuraron controlar estos espíritus por sus sacerdotes o chamanes llamados "bohíques". El sistema político de los taínos era jerárquico, en el cual las islas fueron divididas en grupos, cada isla a su vez fue dividida en provincias gobernadas por jefes conocidos como caciques. Las provincias fueron a su vez fraccionadas en distritos dirigidos por un subjefe y cada pueblo fue gobernado por una especie de alcalde. Rendían culto a los muertos a quienes colocaban en bóvedas de piedra cubiertas de lajas.


Una de las características de los arahuacos es su religiosidad, sus dioses como el sol, el viento y la lluvia representan las fuerzas de la naturaleza. Los arahuacos eran politeístas y habían alcanzado un desarrollado cultural que les permitía la creación de una serie de mitos para explicarse los fenómenos naturales y para la creación de la luna, el sol, los mares, la tierra y de los hombres. Los cemis representan las diferentes (fuerzas de la naturaleza), tales como Yucahi, dios de la agricultura; Marohi, dios de la Luna; Juracán, dios de las tempestades. 

Los Timotocuicas

Cultivaron, maíz, papa, tabaco, cacao y yuca dulce  Domesticaban animales (pavos, paujies y guacharacas). Realizaban intercambios comerciales con mantas, alfileres etc. Utilizaban como moneda las semillas de cacao.

Practicaban el fetichismo y adoraban ídolos de piedra y arcilla. Ofrecían sacrificios humanos y construían templos. Hasta tiempos coloniales, persistieron los sacrificios de niñas secretamente en la Laguna de Urao.

Icaque, la diosa prehispánica andina, así como su templo y el ritual con el que la veneraban, fueron descritos por el  cronista Juan  de Castellano, quien señala que se hacían fiestas y sacrificios humanos en su nombre.


Los Yanomamis

En las viviendas, cada familia tiene asignado un espacio para colgar los chinchorros, cerca del cual cada uno tiene su propio fogón, mientras que todas las actividades sociales se realizan en el patio central.



Conservan sus elementos culturales, religiosos y lingüísticos. Sus vidas giran alrededor de sus creencias ancestrales. Forman una sociedad igualitaria y no jerárquica, pues los chamanes, quienes ejercen la autoridad moral, no poseen distintivos y entre las comunidades funciona el principio de reciprocidad.

El mundo espiritual es una parte fundamental de la vida de los yanomamis. Cada criatura tiene un espíritu, a veces estos son malignos y atacan a los yanomamis y se cree que les provoca enfermedades

Según los yanomamis los chamanes controlan a estos espíritus a través de su trance visionario.

Creen en la existencia de otra vida en el más allá. Para no quedar mal tienen que tomar ciertas precauciones para esa vida futura. Allá arriba hay un gran shabono para todos. Allí habrá abundante cacería y frutos opulentos 


Una de las costumbres más curiosas y primitivas de esta etnia es la práctica del canibalismo endogámico como ritual sagrado: en una colectiva ceremonia funeraria se comen las cenizas de los huesos de su pariente muerto. Creen que en los huesos reside la energía vital de la persona fallecida y que al ingerir sus cenizas la reintegran al grupo familiar.

Utilizan la sustancia tóxica de unas plantas para impregnar las puntas de sus flechas. Este veneno (curare) paraliza al animal cazado sin alterar su conciencia ni la sensibilidad.

Las mujeres se adornan atravesando con un palo pequeño su tabique nasal y las comisuras de los labios. Utilizan también pinturas corporales. La etnia lleva siempre el mismo corte de pelo, con flequillo y la coronilla rasurada (estilo capuchino). Las cicatrices son muestra de valor y madurez. Tienen una pequeña estatura y sólo se visten con un cinturón tubular los hombres y un pequeño fleco las mujeres.

Los Kariñas

En eventos especiales de la comunidad, las mujeres usan batas de colores vivos, adornadas con volantes en la parte superior de la blusa y en la parte inferior de la falda. Este traje es usado en los bailes del mare-mare, en las fiestas patronales de cada comunidad y en las fiestas dedicadas a los difuntos, llamada Akaatompo.

En cuanto a su cultura y religión se ha de considerar el mare-mare, que es un baile festivo. El Akaatompo (día de los muertos) es la festividad más importante de los kariña, y se celebra el 1 y 2 de noviembre. Viven cerca de los ríos, los niños son excelentes nadadores, practican diversos juegos con paraparas, juegan metras y quiminduñas; ellos mismos fabrican los trompos y zarandas para jugar y también practican competencias de arco y flecha.


El mundo religioso de los kariñas es muy rico y dinámico. Su relación con el universo plantea cuatro regiones con sus respectivos dueños: kaputano, el dueño del cielo y “abuelos de los abuelos”; maware, el dueño del cerro; akodumo, el dueño del agua e Ioroska, el dueño de la tierra. En algunos de ellos se han incorporado elementos de la cultura católica y criolla en general. Creen también en la religión católica, pero no mayoritariamente.

Los Wayuu

Esta etnia tiene una particularidad que forma parte de sus valores y tradiciones, que van más allá del trabajo o sus actividades económicas, y es que a pesar de formar parte de Venezuela, se rigen por leyes establecidas entre ellos mismos, obedecen a una autoridad que se basa en un sistema autóctono de justicia y que conocido como el palabrero, quien es el encargado de resolver conflictos entre clanes, cobrar los pagos o indemnizaciones por ofensa y agresiones.

El hombre ejerce autoridad en el hogar, y se le permite tener varias mujeres, además es el encargado de colocarles el nombre a los hijos, y decidir sobre el futuro de los mismos.

Dentro de las costumbres, la muerte por hechos naturales para los guajiros son una forma particular de celebrar la vida, aunque para otras sociedades represente dolor y tristezas, por ello ellos lo celebran con velorios donde abunda la comida (chivo, ovejo, carne en vara, plátano yuca, entre otros), y la bebida, todas con alcohol (chirrinchi, ron, guarapita, y cerveza).

Matrimonio: El matrimonio siempre se contrae con una persona de otro linaje uterino, con la particularidad de que implica, por parte de los padres del hombre, el pago de una dote a los padres de la mujer. Los wayuu practican ocasionalmente la poligamia, que constituye un marco de prestigio. Dentro de la sociedad wayuu, las mujeres desempeñan un importante papel social.

Ritos: Los wayuu tienen shamanes masculinos y femeninos, quienes para sus curaciones utilizan las técnicas tradicionales: canto con maraca, uso de tabaco, succión de los elementos patógenos, etc.

Ritos funerarios: los huesos  del difunto se colocan en una urna funeraria y las mujeres deben bañar al difunto. Se realizan dos entierros.

Las mujeres, además del cuidado de la casa y de los niños, dedican su tiempo a la confección de objetos artesanales, tejidos en telar y crochet; las hamacas tejidas en telar y decoradas con dibujos de flores o de plantas de brillante colorido, y los bolsos multicolores tejidos a crochet, por su excelente calidad, son los renglones artesanales más apreciados para la venta, y por los que se pagan elevadas sumas.

El aspecto principal de las creencias wayuu se refiere a las relaciones entre la vida y la muerte, y las diferentes dimensiones que tiene cada una de ellas. Seres sobrenaturales y sobrehumanos actúan cotidianamente en la vida del wayú, y contribuyen al equilibrio cultural y ambiental de su reproducción social.




Los Yecuanas

Útiles: Se han ido adaptando al medio ambiente y sofisticándose. La cestería es una de sus industrias tradicionales, pero la mayor especialidad que tienen es la construcción de curiaras, con las que emprendían hasta el siglo XIX largas expediciones comerciales hasta Georgetown, capital de Guyana.

Matrimonio: El sistema es matrilineal y el grupo está integrado por varias familias que giran alrededor de los padres y de sus hijas casadas.
Jerarquía: Los principales personajes son el cacique y el brujo o curandero.

Ritos: En tiempos anteriores, los Yekuana tenían ritos de iniciación de pubertad tanto par los varones como para las hembras. Los ritos shamánicos presentan las manifestaciones características de la mayoría de las tribus caribes: cantos invocatorios con la maraca, uso de tabaco  y alucinógenos, aplicación ocasional de hierbas medicinales, succión de la materia patógena.

En las ceremonias de curación el shamán emplea una maraca de uso exclusivo, cuyo mango son dos figuras humanas que representan dos shamanes celestiales sentados, situados espalda contra espalda.

Muerte: Los Yekuana entierran sus muertos en fragmentos de curiara. Al ocurrir una muerte sospechosa o en caso de muertes múltiples, los Yekuana abandonan el pueblo.

Ambos sexos usan pintura facial y corporal con motivos geométricos que se aplican a la piel con sellos de madera o con pinceles improvisados.




Los Piaroas

Costumbres: Los piaroas practicaban las hipérboles en sus trabajos, los hombres son para: casería, elaborar conucos, cazas pescas y las mujeres para la atención a las actividades del hogar, cuidados de los niños y preparar las comida. La mujer adolescente se les da estas enseñanzas en su fase de preparación y formación para su vida antes de contraer pareja.

Ritos: Se cree que existen grupos que conceptúan a ciertos animales como tótem, esos animales, en consecuencia son tabú para los cazadores.

Matrimonio: El matrimonio piaroa se realiza entre personas que se han sometido a sus respectivos ritos de iniciación de pubertad. Los individuos más eminentes dentro de la sociedad Piaroa, tales como caciques, shamanes, etc., pueden practicar el matrimonio poligámico. Tras el matrimonio y en compensación, el esposo queda obligado a prestar servicios a los padres de su cónyuge.

Muerte: Se supone que practican el entierro secundario, dejando los cadáveres en cuevas que reservan para osarios.

Construyen tres tipos de casas comunales en las que habitan varias familias. La más característica es la denominada “churuata” de base redonda y techo puntiagudo, en la que pueden residir hasta cien personas.




Los Caribes

Parte de sus costumbres creaban utensilios de conchas (gubias, hachas) la mayor parte de estos eran de madera u otro material no perecedero; no usaban trajes, gustando de adornase con pintura y plumas; sus habitaciones se encontraban en boca de cuevas cerca de los ríos o el mar, aunque también al aire libre; enterramientos directamente en la tierra de las cuevas, los cráneos presentaban aplastamientos frontales.

Las creencias religiosas de los caribes estaban fundamentadas en el culto a la muerte. La principal ceremonia espiritual era el funeral del cacique, cuyo cuerpo era cremado y las cenizas depositadas en urnas junto a sus objetos personales, constituidos, en gran parte, por armas y joyas. Junto a él eran enterrados los esclavos y las concubinas favoritas del cacique, ya que los caribes creían profundamente en la vida después de la muerte.

Adoraban al Sol, la Luna, las estrellas y algunas fuerzas de la naturaleza, lo mismo que a animales como la serpiente y el jaguar. Para ellos, cada actividad cotidiana estaba relacionada con alguna fuerza que desconocían y veneraban. Los sacerdotes, conocidos como chamanes, mohanes o pinches, tenían gran influencia entre las tribus. Eran magos y médicos a un mismo tiempo. Utilizaron plantas naturales para narcotizar a los enfermos y trataron ciertas enfermedades con yerbas medicinales y tabaco.